Lo hemos chequeado y francamente Carlos Salomón Heller no es la excepción a la paranoia de cuantos políticos transita nuestra vernácula geografía. El hombre que con cara de buenazo desde su afiche de campaña nos propone que “resiste cualquier archivo” no sólo es una triste falacia sino que invariablemente cae en el lugar común donde tantos otros caen permanentemente, y a la hora de desplegar “su” marketing igual que muchos conocidos y por conocer se postula como el paradigma nacido para ser admirado y bendecido, sin sombras de reproches ni señalización de errores cometidos.
No vamos a profundizar el voluminoso archivo del hombre fuerte de la banca solidaria que desborda idas y vueltas a lo largo de su pasado inmediato y bien abarcaría toda una soberana lista sabana. En este post vamos a resaltar una sola perlita que lo pinta de cuerpo y alma a el ahora candidato progre por la Capital Federal, el hombre salido del riñón del casi disgregado Partido Comunista argentino que supo borocotizarse con los gobiernos que anteceden.
El cooperativista Heller hace sólo unos días atrás en su blog escribía esto: Es bueno aclarar que nunca fui ni tengo pensado ser candidato del kirchnerismo. Hace dos años fui candidato a vicejefe de gobierno, y me desgañité diciendo que una cosa es conformar un espacio que incluye al Kichnerismo, y otra es ese reduccionismo de “o se es kirchnerista o se es antikirchnerista”.
Como decíamos anteriormente, hoy no sólo es candidato sino que además es el Nº 1 en la lista que bendijo el presidente de facto en pleno ejercicio, el hombre del afiche sin medias tintas se suma al proyecto K para “impedir el avance de la derecha” según sus propias palabras.
Un claro ejemplo que desnuda sustantivamente que la verdadera política en nuestro terruño obra religiosamente en sentido contrario y donde Carlos Salomón Heller no es precisamente la excepción a las reglas aun cuando te desafíe a chequear sus archivos.
No vamos a profundizar el voluminoso archivo del hombre fuerte de la banca solidaria que desborda idas y vueltas a lo largo de su pasado inmediato y bien abarcaría toda una soberana lista sabana. En este post vamos a resaltar una sola perlita que lo pinta de cuerpo y alma a el ahora candidato progre por la Capital Federal, el hombre salido del riñón del casi disgregado Partido Comunista argentino que supo borocotizarse con los gobiernos que anteceden.
El cooperativista Heller hace sólo unos días atrás en su blog escribía esto: Es bueno aclarar que nunca fui ni tengo pensado ser candidato del kirchnerismo. Hace dos años fui candidato a vicejefe de gobierno, y me desgañité diciendo que una cosa es conformar un espacio que incluye al Kichnerismo, y otra es ese reduccionismo de “o se es kirchnerista o se es antikirchnerista”.
Como decíamos anteriormente, hoy no sólo es candidato sino que además es el Nº 1 en la lista que bendijo el presidente de facto en pleno ejercicio, el hombre del afiche sin medias tintas se suma al proyecto K para “impedir el avance de la derecha” según sus propias palabras.
Un claro ejemplo que desnuda sustantivamente que la verdadera política en nuestro terruño obra religiosamente en sentido contrario y donde Carlos Salomón Heller no es precisamente la excepción a las reglas aun cuando te desafíe a chequear sus archivos.
2 comentarios:
No me moleste en averiguar pero temìa que fuera asi; como dije hace poco, no se si en este blog...pero...¿ existe en èste paìs alguien que este limpio? que realmente sea de "buena cepa"?
este es el amigo y financista del pollo jajajajajajajajaj, estan hasta la pija
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