Haedo se queja

No es nuevo que la empresa TBA, con su política de desmantelamiento del sistema ferroviario, no escuche ningún reclamo que se haga por parte de usuarios, trabajadores u organizaciones que representan a la población. La negativa de reabrir el paso a nivel de Fresco, al igual que hace con muchísimos otros cerrados al momento de la privatización del servicio, es una muestra de que nada le importa aun en conocimiento del perjuicio que provoca a la sociedad en su conjunto. Lo único que vale es recortar gastos para engrosar sus ganancias. Y no es sólo este tema. En Haedo han cerrado el acceso oeste del anden, condenando a caminar cerca de 300 mts para alcanzar la única boletería que aun funciona, donde se puede "perder" dos trenes en las horas pico por la tardanza en la fila que se provoca, con las consecuencias que tiene para los trabajadores pasajeros. El permanente incumplimiento de los horarios, el mal estado del mobiliario en general, los incendios periódicos de los vagones, el deterioro de las vías y las múltiples faltas de respeto hacia los usuarios, han llevado a que se denuncie, por parte de los trabajadores y de expertos en la materia, el peligro que se corre si las cosas continúan de esta manera. Por último, la situación es más indignante cuando se verifican los millonarios subsidios que recibe la empresa que son pagados por toda la ciudadanía. TBA no tendrá nunca ni la capacidad ni la voluntad de transformar los ferrocarriles en un servicio digno en el marco de un proyecto más amplio del transporte público.

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